Salud digital & inteligencia artificial
La ficción a veces anticipa la realidad, la imaginación predice lo que está por venir. «En una escala del uno al diez, ¿cómo calificaría su dolor? Fue Baymax quien hizo esta pregunta, el superhéroe de la película de dibujos animados Big Hero 6, ganadora del Oscar en 2015. Ese prototipo de trabajador sanitario personal, de aspecto «suave y mimoso», fue diseñado para adaptarse con inteligencia y tacto a las necesidades de sus pacientes. Aprendió con el tiempo y la práctica a conocer cada vez mejor sus necesidades. Unos años después de ese escenario visionario, el interés de la comunidad de estudiosos de la Salud Digital y la Inteligencia Artificial no deja de crecer. Así lo atestigua una bibliografía científica sobre el tema que no sólo está actualizada, sino que es marcadamente transdisciplinar.
Antes y después del Covid
El cambio de paradigma impuesto por Covid en un corto espacio de tiempo ha sido sin duda un factor. Pero hay algo más que eso. La emergencia sanitaria explica una notable aceleración en el uso de las herramientas informáticas. Tomemos como ejemplo la telemedicina, el seguimiento a distancia de los pacientes, la autogestión de los enfermos crónicos, la difusión de los biosensores para medir los parámetros vitales o, más banalmente, el uso generalizado de las historias clínicas electrónicas. El cambio, sin embargo, es más profundo y viene de lejos. El creciente uso de la inteligencia artificial y la automatización, por ejemplo, del National Health System (NHS), se remonta a principios de la década de 2000 en el ámbito de la logística. Veinte años después, las perspectivas de uso de la robótica en el sistema sanitario británico, que estaba a la vanguardia de este campo de experimentación, se han extendido hasta la atención al paciente. Así lo documenta una breve entrevista concedida recientemente a la BBC por Tim Whittlestone, subdirector de Sanidad del Southmead Hospital en Bristol.
Automatización y machine learning
Lo humano y lo post-humano, entre el hombre y la máquina, son inciertos y todavía indefinidos. La introducción de tecnologías avanzadas responde a problemas que están a la orden del día desde hace tiempo, desde el envejecimiento del personal sanitario, con mayores dificultades para su contratación, hasta el derecho a atender a una población de edad avanzada cuyas tasas de hospitalización son cada vez más altas. Por un lado, se espera que la medicina digital desempeñe un papel auxiliar, y a largo plazo sustitutivo, en la atención a los pacientes. Por otro lado, se está promoviendo su uso en el ámbito real de la atención clínica, en particular en la medicina preventiva. Uno piensa en la importancia del aprendizaje automático en el diagnóstico avanzado, la oncología y la medicina geriátrica.
COD19: modelos predictivos y seguimiento de pacientes por Covid
Spindox está bien preparado para este acontecimiento, con experiencia previa y capacidad para interpretar los cambios que se están produciendo. La referencia es, en primer lugar, el COD19, el Centro Operativo de Altas de Covid-19 que en 2020 la Región de Lombardía seleccionó como una de las colaboraciones destinadas a combatir la emergencia sanitaria. El proyecto de investigación experimental y desarrollo industrial contó con la participación de Spindox. Combinando técnicas de Inteligencia Artificial, estadística y optimización matemática, el objetivo era desarrollar una plataforma que monitorizara a los pacientes de Covid en sus domicilios y luego generara modelos predictivos sobre la evolución de la enfermedad. Mediante el uso de un software basado en la System Dynamics y la simulación de agentes (Modelos Predictivos de Pandemia), perfeccionado a través de estimaciones extraídas de la literatura científica, fue posible crear un sistema de apoyo a la toma de decisiones a disposición de los profesionales sanitarios.
Spindox y Digital Therapeutics
La experiencia de los proyectos realizados en el marco de la pandemia ha permitido al grupo reforzar sus conocimientos en el ámbito de la Digital Therapeutics (DTx). Cristiano Carlevaro, director general de Spindox Labs, confirmó que «entre las líneas de investigación que se desarrollan actualmente en los laboratorios de Trento, algunas se centran en el acercamiento a las tecnologías a través de la experiencia del usuario». Mario Conci, director de proyectos en Spindox Labs y con experiencia en la unidad de investigación Intelligent Interfaces and Interaction (i3) de la Fondazione Bruno Kessler, nos explicó cómo encajan los estudios que se están llevando a cabo en Trento con la experimentación de «tecnologías de apoyo a las personas con necesidades específicas», incluidos los pacientes. La atención debe centrarse en «cómo el ser humano interactúa con el artefacto para explorar las posibles conexiones entre la Inteligencia Artificial y las técnicas de inclusión social«.
La medicina digital entre la bioética y la regulación legal
El alcance trascendental de los cambios descritos sugiere la necesidad de un debate sobre cuestiones bioéticas que no puede seguir evitándose. ¿Seremos capaces de humanizar el mundo digital antes de que borre nuestra humanidad? Esta pregunta se responde en el libro Inteligencia Artificial y Medicina Digital. Una guía crítica. Las cuestiones que se plantean no pueden encerrarse fácilmente en la filosofía de la medicina. El desarrollo de la Digital Therapeutics (DTx) requiere el análisis y el pronunciamiento de las instituciones que nos gobiernan. También en este sentido, la Comisión Europea ha iniciado una reflexión jurídica emitiendo un documento para regular el uso de la Inteligencia Artificial en función del contexto y la finalidad para la que se utilizan los sistemas de IA. La propuesta será evaluada por el Consejo de Europa y el Parlamento para que se convierta en reglamento como muy pronto en 2023. Después, los Estados miembros de la UE tendrán que adaptar su legislación nacional al contenido del reglamento.